El huracán Irma sigue su trayectoria y ha llegado este viernes al sur de las islas Bahamas. En su paso por el Caribe ha alcanzado ráfagas de hasta 260 kilómetros por hora. Por el momento ya hay 15 muertos y más de medio centenar de heridos. Este ciclón ha impactado especialmente en las islas de Barbuda y San Martín. También golpeó con violencia la isla de Puerto Rico y República Dominicana y Haití. Las últimas actualizaciones del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos indican que el huracán irá recorriendo el Caribe en dirección noroeste.
Nuestras comunidades en Puerto Rico y República Dominicana han sufrido junto con el resto de población local las devastadoras consecuencias de este huracán.
Desde Puerto Rico, nuestra hermana Bethlehem Olmilla nos cuenta que se quedaron sin electricidad en el barrio Viejo San Juan y no sabrán cuánto tiempo (les han dicho que entre 3 y 6 meses) se tardará en restaurar la red eléctrica. Además, la planta de energía de reserva con la que contaban se encuentra quebrada, por lo que están a la espera de las piezas necesarias para repararla. Afortunadamente, todas se encuentran bien en la comunidad en Viejo San Juan-Casa La Providencia. María Socorro Sandoval, la Superiora Provincial, ha confirmado que la comunidad en Hato Rey está bien, al igual que la de Bayamón. El huracán Irma llegó a Puerto Rico alrededor de las 5 pm del miércoles, dado que las hermanas viven a unos 400 metros de la costa lo sintieron con mayor intensidad que en otras áreas de la zona. En la casa donde Bethlehem se encuentra prepararon toda la casa antes de que llegara el huracán para evitar daños mayores. Además, el Municipio de San Juan ordenó una evacuación obligatoria de los residentes de la zona la noche anterior al huracán. Las hermanas enviaron a todos los residentes de Casa La Providencia a sus hogares dos días antes de que el huracán llegara, como medida preventiva.
Por otro lado, nuestra comunidad en República Dominicana sufrió de igual modo el paso del ciclón y nos envían este vídeo para que podamos ver los destrozos que ha causado a su paso:
La congregación se solidariza con esta situación y seguimos en oración por todos los países y todas las personas a las que está afectando.
