A través de una Carta firmada por el Prefecto y el Secretario de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, la Congregación de Institutos de Vida Consagrada pide más oración por Ucrania.
El cardenal João Braz de Aviz, prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, y su secretario, monseñor José Rodríguez Carballo, invitan a los consagrados y consagradas a intensificar sus oraciones por la paz en Ucrania y en todo el mundo.
Nunca habrá perdedores ni ganadores –reza la carta- «sino sólo hombres, mujeres y niños devastados en su ser por el conflicto». A ejemplo de «Cristo, que desde la cruz abrazó al justo y al pecador», la invocación es que «la oración sea por la salvación de todos». Hagamos «gestos de paz dondequiera que estemos, junto con todo hombre y mujer de buena voluntad; dejémonos convertir por el Espíritu Santo a las obras de paz para que nuestra vida hable y sea, con mansedumbre y verdad, un testimonio de la misericordia de la que el Padre nos hace un regalo».
ACNUR estima ya en cerca de 400.000 los refugiados que han cruzado la frontera en busca de acogida en los países circundantes.
La Compañía de Jesús en Ucrania es parte de la provincia de Polonia del Sur y está presente en Lviv, Kiev, Khmelnytsky y Chernivtsi. Con 11 jesuitas en el país, la Compañía lleva dos residencias, dos parroquias, una casa de ejercicios, y dirige una casa de acogida de refugiados. Uno de los jesuitas es un capellán militar.
En estos momentos el Servicio Jesuita a Refugiados Europa está coordinando el diseño de una respuesta de acogida y acompañamiento a población refugiada en los países fronterizos con Ucrania.
Los salesianos en Ucrania también están recibiendo a refugiados en los espacios de los que disponen y, a través del P. Chaban, han solicitado ayuda económica para poder atenderlos. Esta primera ayuda se destinará, según explica el salesiano, a:
– Preparación del refugio («ya están acogidos los chicos y chicas de nuestra casa y están llegando otros refugiados»).
– Mantenimiento de los refugiados (comida, camas, mantas, etc.) Se espera «acoger hasta 300 personas, contando los 75 chicos que están refugiados allí. Además, nos están llamando desde el ayuntamiento pidiéndonos ayuda para los próximos días».
También la ONG World Central Kitchen del chef asturiano José Andrés se ha desplazado a la frontera entre Ucrania y Polonia para alimentar a las personas que están saliendo del país atacado por el gobierno ruso. Religiosas de Cáritas le están ayudando en este proceso.
Desde la CONFER deseamos que todas las comunidades religiosas puedan unirse en los diferentes lugares a las iniciativas que surjan en favor de la paz y abrir nuestras puertas a aquellos/as que necesiten acogida como refugiados/as.