Este sábado, 1 de octubre de 2022, ha concluido el Encuentro Internacional de Realidades Emergentes sobre Prostitución y Trata, en respuesta a la Planificación General de la Congregación, por la necesidad de “ser audaces en acoger con audacia el desafío de abrirnos a realidades emergentes de prostitución y trata, discerniendo lo que tenemos que soltar para generar nuevas respuestas”.
Ha sido un espacio de trabajo, espiritualidad y convivencia de un “grupo de caminantes” formado por 41 personas de la Familia Oblata: Laicos, voluntarios, hermanas y profesionales, procedentes de Argentina, Uruguay, Guatemala, Colombia, México, Brasil, Puerto Rico, Angola, Filipinas, Portugal, España -países donde la misión está presente-, del Gobierno General, del Grupo de Trabajo Realidades Emergentes, y de diferentes proyectos y programas locales.
Juntos hemos recorrido un camino en tres etapas: VER, JUZGAR y ACTUAR, de la mano del sacerdote Martín Iriberri SJ, director de la ONG de cooperación internacional ALBOAN, que nos acompañado como facilitador del proceso durante todo el encuentro.
Comenzamos cada día con una oración para conectarnos con nosotras mismas, desde este espacio espiritual nos ayudamos a valorarnos, y centrarnos para dar inicio o retomar lo vivido en estos días y para ir concretando el trabajo encomendado.
VER
Los tres primeros días los dedicamos al VER, una etapa en la que fuimos conectando entre nosotros y con los orígenes de la Congregación: La Casa Madre, donde yacen los restos de los fundadores, el pozo, la parra, los alrededores de Ciempozuelos, pueblo que vio nacer la primera casa de asilo para las mujeres.
En esta primera etapa conocimos las diferentes realidades que se viven hoy en la misión oblata, en nuestras 3 provincias y Fundación Serra-Schönthal, a través de 3 fronteras: Existenciales, geográficas y virtuales, además de la experiencia desde la construcción de caminos “inter”.
Concluimos esta fase con un momento festivo y de compartir gastronomía y bailes típicos de las diferentes regiones de los participantes.
JUZGAR
En la segunda etapa del camino, con nuestro foco puesto en descubrir lo emergente de manera global para la misión oblata, atendimos a dos sesiones iluminadoras: La primera fue impartida por la hermana oblata Inmaculada Ruiz de Baluguera y se centró en los orígenes de la Congregación y en las realidades emergentes que enfrentaron los fundadores en el siglo XIX, mientras la segunda , ofrecida por Daniela Cannavina, Hermana Capuchina de la Madre Rubatto, estuvo enfocada a iluminar ante la cuestión “¿A qué nos llaman Jesús y las mujeres?”.
Algunas inquietudes compartidas en el grupo de discernimiento fueron el “miedo a lo desconocido”, “quedarnos paralizados ante lo que no controlamos”, “darnos el permiso de poder actuar en clave de ensayo-error”, “conservar los valores vigentes desde los orígenes hasta nuestros días”, “acoger la pedagogía de Madre Antonia en nuestras tareas cotidianas”…
ACTUAR
En trabajo por grupos y compartido en asamblea, con los ecos que iban surgiendo, hemos llegado al final del camino de discernimiento. El grupo de 41 “tejedoras” reunidas estos días hemos elaborado un documento en el que priorizamos 7 acciones para la misión en respuesta a las realidades emergentes detectadas por el grupo:
- Coordinación entre los proyectos de la Congregación
- Posicionamiento institucional ante la realidad de la prostitución
- Plan de formación congregacional de identidad oblata y atención a mujeres en contextos de prostitución
- Atención a las mujeres en movilidad y fronteras
- Enfatizar la participación y el papel activo de las mujeres dentro de los diferentes proyectos congregacionales
- Observatorio sobre prostitución virtual coordinado por la Fundación Serra-Schönthal
- Formación y nuevas herramientas para acceder a esta nueva frontera virtual de prostitución
En el documento final, que estudiará el Consejo Ampliado los próximos días -formado por el Gobierno General y los Gobiernos Provinciales- queda recogido por un lado, un resultado tangible (acciones ordenadas con los comentarios sobre acción, agentes, etc), y por otro lado, un resultado intangible: Un grupo de personas en el que nos hemos reconocido como identidad oblata, hemos reconocido nuestra diversidad, así como también lo que nos une.
Como comunidad de Familia Oblata finalizamos el encuentro con la celebración de la Misa en acción de Gracias y con un momento fraterno compartido.